sábado, 25 de mayo de 2013

Cavazos Pérez  detalló las nueve estrategias que se desprenden del estudio:
1. Establecer un programa de monitoreo en los viñedos para entender cómo los afectan las variaciones atmosféricas (la fenología), y establecer además relaciones con el cambio climático y las plagas.
2. Crear plataformas en línea para consultar datos climáticos.
3. Implementar obras de retención de agua pluvial en zonas estratégicas.
4. Apoyar la infraestructura agrícola que permita usar el agua de manera más eficiente.
5. Regular el crecimiento urbano y la vivienda, respetando el ordenamiento territorial y la vocación de uso de suelo.
6. Identificar y evaluar las variedades de uva más resistentes al estrés, y al aumento de temperatura y salinidad.
7. Promover la expansión de la región vitivinícola a otras regiones de Baja California, manteniendo un balance sustentable con la vegetación nativa.
8. Impulsar la vinculación de los centros de investigación para lograr la transferencia del conocimiento, y avanzar así con los productores.

9. Generar iniciativas de ley que apoyen al sector vitivinícola, especialmente en materia de impuestos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario